Pensamiento del martes 25 de julio de 2017.
"Un Iniciado no sólo habla con palabras. Su lenguaje puede compararse al de la naturaleza. ¿Qué hace la naturaleza?... No cesa de enviarnos mensajes; no se sirve de palabras, y sin embargo nos habla: el sol, las estrellas, los bosques, los lagos, los océanos, las montañas… Todos hablan y nos comunican sin cesar algo de su vida, de sus secretos. Estas comunicaciones se graban en nosotros, pero no somos conscientes. Sin embargo, gracias a ellas, poco a poco nuestra sensibilidad se enriquece y nuestra comprensión mejora. No sabemos cómo tiene lugar esa comprensión, pero se realiza.
El lenguaje de un Iniciado es idéntico al de la naturaleza. Gracias a la fuerza de su espíritu, emite partículas, proyecta rayos y, consciente o inconscientemente, aquellos que los reciben se sienten iluminados, enriquecidos."
"Un Iniciado no sólo habla con palabras. Su lenguaje puede compararse al de la naturaleza. ¿Qué hace la naturaleza?... No cesa de enviarnos mensajes; no se sirve de palabras, y sin embargo nos habla: el sol, las estrellas, los bosques, los lagos, los océanos, las montañas… Todos hablan y nos comunican sin cesar algo de su vida, de sus secretos. Estas comunicaciones se graban en nosotros, pero no somos conscientes. Sin embargo, gracias a ellas, poco a poco nuestra sensibilidad se enriquece y nuestra comprensión mejora. No sabemos cómo tiene lugar esa comprensión, pero se realiza.
El lenguaje de un Iniciado es idéntico al de la naturaleza. Gracias a la fuerza de su espíritu, emite partículas, proyecta rayos y, consciente o inconscientemente, aquellos que los reciben se sienten iluminados, enriquecidos."