Pensamiento del martes 17 de Octubre de 2017.
"Para convertirse verdaderamente en un creador, el hombre debe recurrir a ciertas facultades que hay en él para entrar en relación con el mundo espiritual. Porque es del mundo espiritual de donde recibe ese soplo que llamamos inspiración.
Es importante conocer las condiciones favorables para la inspiración, porque no nos visitan por casualidad. Diréis que habéis tenido inspiraciones en unas circunstancias, en unos lugares o en unas posiciones un poco inverosímiles.
Esto puede en efecto ocurrir: estáis pelando verduras, recogiendo un objeto o poniéndoos los zapatos, y de repente una corriente os atraviesa, una imagen se impone a vosotros: sentís que habéis recibido una revelación. Y por el contrario, podéis reunir todas las condiciones materiales ideales para que la inspiración venga a visitaros y no recibís nada. El soplo divino no llegará necesariamente a visitar a aquél que está sentado en posición de loto y los ojos cerrados en medio de nubes de incienso; no me refiero a estas condiciones. La primera condición a cumplir para la inspiración es la de vigilar la pureza de nuestros pensamientos, de nuestros sentimientos y de nuestros actos. Cuando el terreno está preparado, el espíritu puede llegar cualquiera que sea la situación o la postura en la que os encontréis."
"Para convertirse verdaderamente en un creador, el hombre debe recurrir a ciertas facultades que hay en él para entrar en relación con el mundo espiritual. Porque es del mundo espiritual de donde recibe ese soplo que llamamos inspiración.
Es importante conocer las condiciones favorables para la inspiración, porque no nos visitan por casualidad. Diréis que habéis tenido inspiraciones en unas circunstancias, en unos lugares o en unas posiciones un poco inverosímiles.
Esto puede en efecto ocurrir: estáis pelando verduras, recogiendo un objeto o poniéndoos los zapatos, y de repente una corriente os atraviesa, una imagen se impone a vosotros: sentís que habéis recibido una revelación. Y por el contrario, podéis reunir todas las condiciones materiales ideales para que la inspiración venga a visitaros y no recibís nada. El soplo divino no llegará necesariamente a visitar a aquél que está sentado en posición de loto y los ojos cerrados en medio de nubes de incienso; no me refiero a estas condiciones. La primera condición a cumplir para la inspiración es la de vigilar la pureza de nuestros pensamientos, de nuestros sentimientos y de nuestros actos. Cuando el terreno está preparado, el espíritu puede llegar cualquiera que sea la situación o la postura en la que os encontréis."
Fuente:
http://www.prosveta.com