Pensamiento del jueves 26 de Octubre de 2017.
"Perfeccionarse es una tarea difícil, y muchos, viendo la lentitud de sus progresos, terminan por abandonar, mientras que otros, tan decepcionados de sí mismos, se desesperan. Pues bien, los primeros son débiles y perezosos, y los otros son orgullosos. No hay ninguna razón para caer en la desesperación cuando reparamos que todavía estamos lejos de corresponder a la imagen magnífica de uno mismo en la que hemos soñado.
Hay que ser humildes y decirse: «Muy bien, esta vez todavía no lo has conseguido, y quizá tampoco lo consiga la próxima vez, pero esta no es una razón para dejar de seguir esforzándote.»
No perdáis nunca el deseo de progresar. Si os caéis, no es grave, pero a condición de que cada vez hagáis el esfuerzo de volveros a levantar. En todas las circunstancias de la vida, lo más importante es conservar la voluntad y el placer de avanzar. Porque siempre hay en que perfeccionarse. La idea de perfeccionamiento es inseparable de la existencia humana."
"Perfeccionarse es una tarea difícil, y muchos, viendo la lentitud de sus progresos, terminan por abandonar, mientras que otros, tan decepcionados de sí mismos, se desesperan. Pues bien, los primeros son débiles y perezosos, y los otros son orgullosos. No hay ninguna razón para caer en la desesperación cuando reparamos que todavía estamos lejos de corresponder a la imagen magnífica de uno mismo en la que hemos soñado.
Hay que ser humildes y decirse: «Muy bien, esta vez todavía no lo has conseguido, y quizá tampoco lo consiga la próxima vez, pero esta no es una razón para dejar de seguir esforzándote.»
No perdáis nunca el deseo de progresar. Si os caéis, no es grave, pero a condición de que cada vez hagáis el esfuerzo de volveros a levantar. En todas las circunstancias de la vida, lo más importante es conservar la voluntad y el placer de avanzar. Porque siempre hay en que perfeccionarse. La idea de perfeccionamiento es inseparable de la existencia humana."
Fuente:
http://www.prosveta.com