Pensamiento del lunes 27 de febrero de 2017.
"Todo radica en la manera de considerar a los seres y a las cosas. Si vuestra conciencia está iluminada, cada uno de vuestros pensamientos puede ser el punto de partida de realizaciones magníficas; si no, rechazáis las riquezas ofrecidas por la naturaleza y por los seres humanos, y no comprendéis nada, no ganáis nada, os sentís pobres y desgraciados.
Observad cómo viven los humanos unos al lado de otros: se cruzan y siguen su camino sin ser conscientes de su presencia mutua, como si fuesen bloques de piedra o trozos de madera. Observad también cómo se zarandean. Entonces, preguntarles sobre las relaciones que deben tener con la naturaleza, es pedirles demasiado. Creen ser los únicos seres verdaderamente vivos e inteligentes en el universo, y para probar esta vida y esta inteligencia, ¿qué hacen? Explotan la naturaleza sin ningún escrúpulo, sin darse cuenta de que, al destruirla, destruyen también algo en ellos mismos, se limitan, se oscurecen. Es pues toda una toma de conciencia que debe hacerse en ellos para que las relaciones, no sólo con los humanos sino también con la naturaleza, sean finalmente vivas y ricas. "
"Todo radica en la manera de considerar a los seres y a las cosas. Si vuestra conciencia está iluminada, cada uno de vuestros pensamientos puede ser el punto de partida de realizaciones magníficas; si no, rechazáis las riquezas ofrecidas por la naturaleza y por los seres humanos, y no comprendéis nada, no ganáis nada, os sentís pobres y desgraciados.
Observad cómo viven los humanos unos al lado de otros: se cruzan y siguen su camino sin ser conscientes de su presencia mutua, como si fuesen bloques de piedra o trozos de madera. Observad también cómo se zarandean. Entonces, preguntarles sobre las relaciones que deben tener con la naturaleza, es pedirles demasiado. Creen ser los únicos seres verdaderamente vivos e inteligentes en el universo, y para probar esta vida y esta inteligencia, ¿qué hacen? Explotan la naturaleza sin ningún escrúpulo, sin darse cuenta de que, al destruirla, destruyen también algo en ellos mismos, se limitan, se oscurecen. Es pues toda una toma de conciencia que debe hacerse en ellos para que las relaciones, no sólo con los humanos sino también con la naturaleza, sean finalmente vivas y ricas. "