Pensamiento del miércoles 15 de noviembre de 2017.
"No podéis pedir a un Maestro espiritual que posea todos los conocimientos, y tenga todos los poderes. Sólo tenéis derecho a pedirle una cosa: que sea para vosotros un vínculo con el Cielo, que os guíe por el camino de la luz, que os muestre el camino hacia Dios.
Para empezar, un Maestro espiritual no os retendrá para sí, sabe que su tarea es conduciros más lejos, más alto.
Si insistís en quedaros a su lado, os dirá: «No, no, no contéis tanto conmigo, yo no puedo dároslo todo. Sólo el Señor puede colmaros. Yo únicamente puedo ayudaros a encontrar el camino. Yo soy, si queréis, como un aparato telefónico que os permite comunicaros con el mundo divino, con las jerarquías celestiales, es todo.» Esto es lo que os dirá un verdadero Maestro. Ahora bien, es evidente que si no es un verdadero Maestro, os hará toda clase de promesas que nunca se realizarán, y seréis pues vosotros quienes deberéis discernir."
"No podéis pedir a un Maestro espiritual que posea todos los conocimientos, y tenga todos los poderes. Sólo tenéis derecho a pedirle una cosa: que sea para vosotros un vínculo con el Cielo, que os guíe por el camino de la luz, que os muestre el camino hacia Dios.
Para empezar, un Maestro espiritual no os retendrá para sí, sabe que su tarea es conduciros más lejos, más alto.
Si insistís en quedaros a su lado, os dirá: «No, no, no contéis tanto conmigo, yo no puedo dároslo todo. Sólo el Señor puede colmaros. Yo únicamente puedo ayudaros a encontrar el camino. Yo soy, si queréis, como un aparato telefónico que os permite comunicaros con el mundo divino, con las jerarquías celestiales, es todo.» Esto es lo que os dirá un verdadero Maestro. Ahora bien, es evidente que si no es un verdadero Maestro, os hará toda clase de promesas que nunca se realizarán, y seréis pues vosotros quienes deberéis discernir."
Fuente:
http://www.prosveta.com