"El ambiente en el que se encuentran contribuye mucho a hacer salir lo bueno o lo malo de los seres. Por eso, deben sumergirse lo más a menudo posible en un ambiente de paz, de armonía y de luz. Muchas veces, los efectos de este ambiente no duran demasiado; pero, por lo menos durante unos instantes, su naturaleza inferior se ve reducida al silencio, mientras que su naturaleza superior se desarrolla. Y a fuerza de repetir esta experiencia, la naturaleza superior acabará un día imponiéndose.
Para algunos, adormecer su naturaleza inferior es dar muestras de debilidad. Se encuentran mucho mejor dando rienda suelta a sus instintos de dominación, de agresividad... es decir, cuando dejan salir a sus fieras. Pero estas fieras no sólo atacan a los demás en el exterior. Cuando salen de la jaula, empiezan a devorar a sus propios hijos, es decir a sus buenos pensamientos, sus buenos sentimientos, a los que hubieran debido proteger y fortalecer manteniendo dentro de ellos una atmósfera de paz y de luz."