Pensamiento del lunes 12 de febrero de 2018.
"Un hombre que ha realizado operaciones comerciales deshonestas, se encuentra ante un tribunal. Si esto ha sucedido, es él quien ha fracasado en su empresa. Pero ¿cómo va a explicar este fracaso? Afirma que, desgraciadamente, no ha sabido preverlo todo, pero que la próxima vez intentará hacerlo mejor. Pero no pone en duda la legitimidad de sus actos. Puesto que la sociedad se rige por la ley de la selva, ¿por qué tener escrúpulos? Lo esencial es no dejarse atrapar.
En realidad, aunque este argumento parece ser aceptable para algunos, todos aquellos que deseen progresar espiritualmente deben rechazarlo. Nunca podemos justificar nuestro mal comportamiento poniendo como excusa que los demás actúan mal. Cada uno de nosotros solo debe preguntarse: "¿Qué voy a ganar verdaderamente si adopto tal punto de vista, si persisto en tal actitud, en tal conducta?" y replantearse cada vez la cuestión con sinceridad.""Un hombre que ha realizado operaciones comerciales deshonestas, se encuentra ante un tribunal. Si esto ha sucedido, es él quien ha fracasado en su empresa. Pero ¿cómo va a explicar este fracaso? Afirma que, desgraciadamente, no ha sabido preverlo todo, pero que la próxima vez intentará hacerlo mejor. Pero no pone en duda la legitimidad de sus actos. Puesto que la sociedad se rige por la ley de la selva, ¿por qué tener escrúpulos? Lo esencial es no dejarse atrapar.
Fuente:
http://www.prosveta.com