Pensamiento del viernes 9 de febrero de 2018.
"Entre los creyentes e incluso los místicos, muchos se han sentido, en ciertos momentos de su vida, abandonados por Dios. ¡Como si hubiera sido Él quien hubiera cambiado con respecto a ellos! ¡Ellos piensan que son estables, inmutables en su fe, en su amor, y que es Dios el caprichoso!
"Entre los creyentes e incluso los místicos, muchos se han sentido, en ciertos momentos de su vida, abandonados por Dios. ¡Como si hubiera sido Él quien hubiera cambiado con respecto a ellos! ¡Ellos piensan que son estables, inmutables en su fe, en su amor, y que es Dios el caprichoso!
En los textos sagrados, Dios es llamado el Fiel, el Verídico, y aunque los creyentes repitan estas palabras, con frecuencia se preguntan por qué Dios no los mira, porqué no les escucha, porqué les abandona. ¡Pero no es Dios quien les abandona, son ellos quienes le abandonan! ¿De qué manera? En vez de esforzarse en mantenerse por encima de la zona de las nubes, los pensamientos y los sentimientos egoístas, mezquinos, se abandonan, descienden, y evidentemente bajo las nubes hay oscuridad y hace frío. Es preciso permanecer sobre las nubes, allí donde no hay ni frío ni oscuridad; porque ahí está la morada del Señor; y es allí donde podremos un día vivir, nosotros también, con Él."
Fuente:
http://www.prosveta.com