Pensamiento del martes 5 de abril de 2016.
"Es casi inútil comprometerse con la vía espiritual si no se ha comprendido hasta qué punto la naturaleza inferior del hombre es correosa, rebelde y cómo el trabajo que se emprende sobre ella exige vigilancia, humildad y perseverancia. Demasiadas personas que descubren una enseñanza espiritual, creen que van a transformarse rápidamente. Pues no, ¡el dominio de la vida psíquica es mucho más difícil de lo que se imaginan! Es cierto de que en cada ser humano existe esta capacidad de renovación, de regeneración, de divinización, pero es un proceso muy lento, y lo que cada uno puede hacer en esta existencia depende del trabajo que ya haya iniciado en las encarnaciones anteriores.
Aquél que no tenga conciencia de las dificultades con las que inevitablemente se va a encontrar en el camino espiritual, le será imposible progresar. Entonces, sufrirá, y hará también sufrir a los demás. Comprometerse en el camino espiritual exige ante todo lucidez con respecto a uno mismo."
"Es casi inútil comprometerse con la vía espiritual si no se ha comprendido hasta qué punto la naturaleza inferior del hombre es correosa, rebelde y cómo el trabajo que se emprende sobre ella exige vigilancia, humildad y perseverancia. Demasiadas personas que descubren una enseñanza espiritual, creen que van a transformarse rápidamente. Pues no, ¡el dominio de la vida psíquica es mucho más difícil de lo que se imaginan! Es cierto de que en cada ser humano existe esta capacidad de renovación, de regeneración, de divinización, pero es un proceso muy lento, y lo que cada uno puede hacer en esta existencia depende del trabajo que ya haya iniciado en las encarnaciones anteriores.
Aquél que no tenga conciencia de las dificultades con las que inevitablemente se va a encontrar en el camino espiritual, le será imposible progresar. Entonces, sufrirá, y hará también sufrir a los demás. Comprometerse en el camino espiritual exige ante todo lucidez con respecto a uno mismo."