Pensamiento del domingo 25 de noviembre de 2018.
"Cuando os sintáis inquietos, desanimados o tristes, encended una vela, uniros a través de ella con todo lo que es fuego en el universo. Porque así como una gota de agua puede unirnos a todo el océano, la sola llama de una vela basta para unirnos al sol, al fuego cósmico, al Espíritu Santo cuya la luz es el vestido.
Y cuando hayáis encendido la vela, contemplad la llama hasta sentir que os fundís en ella, que vosotros mismos os convertís en una llama. Pensad que el sol es un fuego, que Dios es un fuego, que el Espíritu Santo es un fuego, que todo lo que nos rodea es fuego: este pensamiento os devolverá cada vez el valor y la paz. Si aprendéis a amar esta llama, a hablarle, poco a poco se convertirá en vuestra amiga y os acostumbraréis a acercaros a ella para obtener de ella el consuelo, la alegría, la inspiración.""Cuando os sintáis inquietos, desanimados o tristes, encended una vela, uniros a través de ella con todo lo que es fuego en el universo. Porque así como una gota de agua puede unirnos a todo el océano, la sola llama de una vela basta para unirnos al sol, al fuego cósmico, al Espíritu Santo cuya la luz es el vestido.
Fuente:
http://www.prosveta.com
25 de Noviembre 2018