Pensamiento del viernes 16 de noviembre de 2018.
"Nuestra vida no es más que una serie de combustiones. Nuestros actos, nuestros sentimientos, nuestros pensamientos, todas nuestras manifestaciones se acompañan de una combustión. Para producir la energía que nos hace vivir, es preciso que haya en alguna parte materiales que se consuman. Esta combustión produce unos residuos que hay que expulsar obligatoriamente, porque, si no, ¿qué es lo que sucede? Mirad la lámpara de petróleo: si no hemos limpiado el cristal, ya no da luz; y la estufa de carbón de la que no hemos quitado la ceniza: ya no puede dar calor. De la misma manera, el hombre que no ha sabido desembarazarse de sus desechos, se hunde en la oscuridad y el frío.
La mayoría de los humanos se imaginan que puede hacer cualquier actividad sin preocuparse de eliminar las impurezas. Se lavan todos los días porque saben que si no, los poros de su piel se obstruirán, lo que no es bueno para la salud. ¿Pero cuándo pensarán lavarse interiormente para liberar los poros de su piel espiritual? Es así como restablecerán las comunicaciones con el mundo divino.""Nuestra vida no es más que una serie de combustiones. Nuestros actos, nuestros sentimientos, nuestros pensamientos, todas nuestras manifestaciones se acompañan de una combustión. Para producir la energía que nos hace vivir, es preciso que haya en alguna parte materiales que se consuman. Esta combustión produce unos residuos que hay que expulsar obligatoriamente, porque, si no, ¿qué es lo que sucede? Mirad la lámpara de petróleo: si no hemos limpiado el cristal, ya no da luz; y la estufa de carbón de la que no hemos quitado la ceniza: ya no puede dar calor. De la misma manera, el hombre que no ha sabido desembarazarse de sus desechos, se hunde en la oscuridad y el frío.
Fuente:
http://www.prosveta.com
16 de Noviembre 2018