Pensamiento del jueves 1 de septiembre de 2016.
"«Trabajar según las leyes de la sabiduría y los métodos del amor, éste es el programa», decía el Maestro Peter Deunov. La sabiduría nos indica el ideal hacia el que debemos dirigirnos; es un programa grandioso que nos ocupará toda la eternidad. Y para realizarlo, debemos adoptar los métodos del amor viviendo cada minuto conscientemente, con mucha atención. Las leyes representan los puntos fijos conforme a los que debemos conducirnos, y los métodos son nuestros instrumentos de trabajo. Los métodos del amor nos permiten realizar los grandiosos objetivos de la sabiduría. Se equivocan aquellos que creen poder llegar a la sabiduría descuidando el amor: se secarán y se harán polvo.
Los métodos del amor son numerosos. Primero nos permiten hacer intercambios con toda la naturaleza mediante la respiración, la nutrición, la contemplación de la salida del sol... Después, intercambios con los seres humanos manifestando la bondad, la generosidad, la paciencia... Y finalmente, intercambios con el mundo divino a través de la meditación, la oración y la contemplación."
"«Trabajar según las leyes de la sabiduría y los métodos del amor, éste es el programa», decía el Maestro Peter Deunov. La sabiduría nos indica el ideal hacia el que debemos dirigirnos; es un programa grandioso que nos ocupará toda la eternidad. Y para realizarlo, debemos adoptar los métodos del amor viviendo cada minuto conscientemente, con mucha atención. Las leyes representan los puntos fijos conforme a los que debemos conducirnos, y los métodos son nuestros instrumentos de trabajo. Los métodos del amor nos permiten realizar los grandiosos objetivos de la sabiduría. Se equivocan aquellos que creen poder llegar a la sabiduría descuidando el amor: se secarán y se harán polvo.
Los métodos del amor son numerosos. Primero nos permiten hacer intercambios con toda la naturaleza mediante la respiración, la nutrición, la contemplación de la salida del sol... Después, intercambios con los seres humanos manifestando la bondad, la generosidad, la paciencia... Y finalmente, intercambios con el mundo divino a través de la meditación, la oración y la contemplación."