Pensamiento del domingo 15 de diciembre de 2019.
"Como una iglesia y un templo son lugares consagrados donde multitud de personas han ido allí a recogerse, encontraréis en ellos buenas condiciones para rezar. Pero lo esencial sois vosotros. Introducid en vosotros el orden, la pureza, la luz y estéis donde estéis, vuestra oración se elevará hasta el trono de Dios.
"Como una iglesia y un templo son lugares consagrados donde multitud de personas han ido allí a recogerse, encontraréis en ellos buenas condiciones para rezar. Pero lo esencial sois vosotros. Introducid en vosotros el orden, la pureza, la luz y estéis donde estéis, vuestra oración se elevará hasta el trono de Dios.
Y así como no es necesario entrar en un lugar de culto para adorar a Dios, tampoco hay necesariamente un momento preciso para hacerlo. Cada religión ha elegido un día particular reservado al culto. Pero en realidad no existe ninguna diferencia entre esos días. A los ojos de Dios, todos los días son igualmente sagrados, bendecidos. Permanecer seis días entre preocupaciones y actividades prosaicas y, el séptimo, por fin, acordarse de que Dios existe y volver su mirada hacia Él, esto no tiene ningún sentido. ¿En qué estado llegaréis ante Él si habéis pasado los otros seis días en la negligencia, la inconsciencia? Lo que vivís el séptimo día dependerá de la forma en que ya hayáis vivido los otros seis. Es pues en todas partes y todos los días que debemos sentirnos en el templo de Dios para celebrarle y adorarle."
Fuente:
http://www.prosveta.com
15 diciembre 2019