Pensamiento del martes 12 de diciembre de 2017.
"A veces, en la montaña, vemos a un árbol en el borde del precipicio con las ramas y el tronco extrañamente torcidos. Ese árbol ha tenido que afrontar los vientos, las tormentas e incluso algunas veces los rayos, pero ha resistido, y esta lucha con los elementos se refleja en su tronco y en sus ramas.
De la misma manera, encontramos en la vida a seres con el rostro torturado, asimétrico, pero sin embargo ¡con cuántos dones, con qué talentos!... Esto prueba que ellos también han estado expuestos a las intemperies de la existencia. Para afrontarlos, tuvieron que desarrollar el intelecto y la voluntad en detrimento de las cualidades del corazón, y estos esfuerzos, esta tensión, se leen en las huellas de su rostro.
La belleza en los seres habla más de sus cualidades del corazón que de sus facultades intelectuales o de su voluntad. La belleza, la verdadera belleza, tiene mucha más afinidad con la bondad que con la inteligencia. Por esto, las personas muy hermosas están a menudo predestinadas a ser víctimas. Es pues importante que estén bien rodeadas por personas que les ayuden a defenderse de las envidias que excita esta belleza."
"A veces, en la montaña, vemos a un árbol en el borde del precipicio con las ramas y el tronco extrañamente torcidos. Ese árbol ha tenido que afrontar los vientos, las tormentas e incluso algunas veces los rayos, pero ha resistido, y esta lucha con los elementos se refleja en su tronco y en sus ramas.
De la misma manera, encontramos en la vida a seres con el rostro torturado, asimétrico, pero sin embargo ¡con cuántos dones, con qué talentos!... Esto prueba que ellos también han estado expuestos a las intemperies de la existencia. Para afrontarlos, tuvieron que desarrollar el intelecto y la voluntad en detrimento de las cualidades del corazón, y estos esfuerzos, esta tensión, se leen en las huellas de su rostro.
La belleza en los seres habla más de sus cualidades del corazón que de sus facultades intelectuales o de su voluntad. La belleza, la verdadera belleza, tiene mucha más afinidad con la bondad que con la inteligencia. Por esto, las personas muy hermosas están a menudo predestinadas a ser víctimas. Es pues importante que estén bien rodeadas por personas que les ayuden a defenderse de las envidias que excita esta belleza."
Fuente:
http://www.prosveta.com