Una vez que la conciencia crece, uno se mueve en una banda de
frecuencia mucho más alta de experimentar la vida y, por lo tanto, el todo-ver
se expande.
Una audiencia interna, ver,
saber, expandirse.
El corazón se abre y con el
corazón abierto, el alma y la mente superior toman alas.
Es aquí que uno se expande en la
conciencia cósmica, y por lo tanto los canales de transmisión más altos se
abren.
Uno puede ahora sintonizar lo que
uno no puede percibir con los sentidos físicos, pero uno puede entrar a través
del corazón abierto, el alma, la mente más alta y, por lo tanto, la conciencia
superior.
En momentos en que uno entra en
este estado de conciencia superior, el ruido de la mente se ha ido.
El corazón se ha abierto
totalmente, y uno está en un estado más alto de amor incondicional.
Uno ahora ve a través de los ojos
del amor puro.
En tal estado uno ha trascendido
el sentimiento-Estado, el ruido de la mente, el desorden, la distracción.
Es aquí que uno finalmente puede
ver un alma con los ojos de lo divino.
Las anteojeras desaparecen, las
personas y las máscaras desaparecen, y con ella toda la separación, las
ilusiones, la ONU-etc.
Cuando uno ve el alma como en
verdad el divino ve y ama el alma, a su perfección, uno está cegado por la luz
y el amor que emana del alma.
El alma propia ahora puede
expandirse, para conocer al otro alma en total amor incondicional – sin juicio,
sin miedo, sin encogerse, sin ego.
Todo es consciente de, es puro y
absoluto amor – a los más altos grados de divinidad y pura, radiante y cegadora
luz.
Mi mayor deseo es que puedas
experimentar esos momentos, y una vez que hayas experimentado esto, no podrás
volver a psiquiatra en tu antiguo estado de ilusos, porque ahora te has
expandido en la más alta verdad de tu alma, y divinidad.
En verdad, estos momentos
son tan preciosos, y uno después siempre https://convivirconelespiritu.wordpress.com
29 de Diciembre del 2017