En esta explicación de los colores y su efecto
sobre la Vida, la salud y el suministro del individuo, afirmamos la Ley de los
Maestros Ascendidos desde el punto de vista de la energía y la vibración. De
esto nadie puede escapar, y para nada importa lo que alguien pueda opinar, la
gran Ley Eterna de la Energía y la Vibración no cambia para acomodarse a las
teorías de intelectos humanos que sólo cuentan con información parcial.
Los Grandes Maestros Ascendidos conocen esta
Magna Ley de la Energía y la Vibración en Su totalidad y, por consiguiente,
Ellos constituyen la única autoridad concerniente a Su Magna operación por todo
el Universo.
Cada color constituye una tasa especial de
vibración que es su cualidad. En argot eléctrico, cada color es una frecuencia especial
que es la manifestación de una forma definitiva y cualidad.
Es sólo en las octavas inferiores de vibración
que la discordia puede registrarse, porque cuando se alcanza cierta frecuencia,
todo se convierte en PERFECCIÓN. Dicho de otra manera, cuando la tasa de
vibración alcanza la Octava de Vida de los Maestros Ascendidos, se torna tan
rápida que únicamente la Perfección puede existir en ella.
Cada tasa tiene un efecto especial sobre los
cuerpos mental, emocional y físico del individuo, sobre su bolsillo y sobre su
mundo en general. Es la comprensión de esto lo que la humanidad necesita tener,
a fin de corregir condiciones destructivas y alcanzar la Perfección.
Rojo y
negro
Nadie en este planeta puede esperar tener Salud,
Prosperidad, Protección o Felicidad en tanto INSISTA en vestirse de negro o de
rojo, o rodearse a sí mismo con esos colores. No hay absolutamente ninguna
vibración de Vida, salud ni prosperidad en el negro, ya que es la ausencia de
toda Vida. Cuando los Maestros Ascendidos hacen esta afirmación, la gente a
menudo dice: “Bueno, y, ¿qué me dices de la oscuridad de la noche que la
naturaleza nos da para dormir?” La verdadera VERDAD es que la vibración de
color propiamente dicha de las horas nocturnas no es negro, sino AZUL OSCURO,
la cual es una vibración energizadora. Muchos cuestionan el rojo en nuestra
bandera. Eso simboliza la sangre derramada por los primeros patriotas por la
Liberación de América, y cuando la discordia en nuestra Tierra sea consumida,
será reemplazada por el Dorado a medida que la Edad Dorada vaya asumiendo el
Pleno Dominio.
Radiación
de impureza
El rojo de este planeta no tiene en sí nada
constructivo para nuestra humanidad, ya que la vibración de color en su
totalidad para los seres humanos en esta Tierra es el DORADO. Estas no son
palabras de los Mensajeros. Son las palabras y la Ley de la Gran Hueste de
Maestros Ascendidos. Todo rojo en este planeta es un registro de impureza, y
cuando esa impureza es eliminada, el color instantáneamente se convierte en
Dorado.
Cualquiera puede comprobar esto. Cuando el fuego
está ardiendo, el color de la llama indica la cantidad de impureza en la
sustancia que está ardiendo. Por ejemplo, cuando se tiran hojas y desecho de la
naturaleza al fuego, la llama se torna dorada, excepto cuando han sido
contaminadas por las impurezas impuestas sobre ellas por la discordia de seres
humanos. El rojo en todo fuego físico es la impureza siendo consumida.
Sangre y destrucción
Esto también se aplica al torrente sanguíneo del
individuo, ya que allí donde el torrente sanguíneo del cuerpo es rojo, en el
caso de los cuerpos de un Maestro Ascendido, el torrente sanguíneo es una Luz
Líquida Dorada. La única diferencia entre el ser no-ascendido y el Maestro
Ascendido es el nivel de impureza en la estructura de carne y en los cuerpos
mental y emocional del individuo.
Observen cómo siempre se utiliza el color rojo
en el mundo externo para indicar destrucción. Aún en el uso de los semáforos y
señales de peligro, el rojo siempre significa destrucción -tanto física como
moral. Es imperativo que la humanidad comprenda esto, a fin de cesar el uso de
esa tasa vibratoria que destruye todo lo que realmente está tratando de lograr.
Absorción
Visual
Especialmente los estudiantes deberían
comprender que sea cual fuere el color con que se rodeen, estarán absorbiéndolo
en sus mentes, sentimientos, cuerpos y mundos. Esto significa que el individuo
es MAESTRO DE TODO, de toda condición que contacte, si comprende esta Ley y la
obedece.
Todo el mundo absorbe a través de los ojos la
cualidad de cada color que contempla, y a través de sus ojos esa cualidad es
registrada en su carne. Esto es muy evidente cuando uno ondea una bandera roja
a un toro -como lo hace el torero- para estimular todas las cualidades
destructivas en el animal. Al ser esto verdad en un animal burdo, imagínense
cuánto más se aplica al ser humano sensible en todas sus actividades diarias.
Esta es la razón de que los bebés y niños pequeños lloren cuando adultos
vestidos de negro o rojo tratan de cargarlos. Los niños son infinitamente más
sensibles que los adultos, y sienten las cualidades en el color mucho más
agudamente que sus mayores.
Rayos
infrarrojos para la sanación
Uno de los efectos más desastrosos de los
colores está en el uso de los rayos infrarrojos para la susodicha sanación. A
veces aplaca el dolor temporalmente, pero si quienes lo utilizan pudieran ver
lo que queda registrado en el cuerpo emocional del individuo (o se adhiere al
mismo), lo cual tendrían que manejar días o semanas después, nunca lo usarían
una segunda vez, ni le darían una segunda mirada a las formas malignas que esto
crea. La Ley es la Ley, gente querida de la Tierra, y nadie escapa jamás de esta
Magna Ley de Energía y Vibración.
Ciertas ratas de vibración crean un sentimiento
de alivio en el individuo, y otras crean lo opuesto. De allí que sea evidente
que si uno desea Perfección, Confort, Felicidad, Prosperidad, etc.,
definitivamente tiene que determinar y controlar las ratas de vibración que
fluyen a través de su mente, de su cuerpo y de su mundo. La elección de color
con el que se rodeará, es una de las maneras más poderosas y sencillas de hacer
esto, y cualquiera puede comprobarlo por cuenta propia.
Sensaciones
corporales
En tanto que los seres humanos mantengan su
atención sobre las sensaciones corporales y las ansíen, por más que se trate
meramente de un compañerismo mental, en esa misma medida permanecerán sometidos
a la esclavitud del miedo, de la duda, de la carencia, del sufrimiento y de las
tragedias de toda descripción. Todo aquel que desee liberarse de esos canales
de sufrimiento, TENDRÁ que elevar la mirada a su “Magna Presencia YO SOY” e,
invocándola a la acción para que asuma el mando y control total de las actividades,
y le dé OBEDIENCIA INCONDICIONAL. Esto le permitirá a la Presencia expandir la
plena Maestría y Perfección a través de la personalidad humana y, así, el
individuo alcanzará la Ascensión.
La Fuente de la propia Vida de cada quien TIENE
que ser puesta antes de la gratificación de los deseos del cuerpo, si es que
alguna vez habrán de ser liberados permanentemente del sufrimiento. La
condición es la misma que si un individuo construyera, terminara y amoblara un
bello hogar para un ser querido. Si la persona que ocupara la casa se
absorbiera tanto en el cuidado y adoración de la misma, hasta el grado en que
olvidara dar reconocimiento alguno al Dador y Suplidor del hogar, el Dador
ciertamente se retiraría y todo colapsaría en ruinas.
Así es y así ha sido a lo largo de las centurias
con toda la humanidad. Los seres humanos de tal manera se han ocupado de las
sensaciones del cuerpo físico y sus exigencias, y han olvidado por completo su
Fuente, el propósito y el objetivo de la Vida. Han olvidado lo que ellos mismos
han decretado para esta vida física. Por consiguiente, todas las experiencias
discordantes no son más que nalgadas constantes para despertar la conciencia
intelectual humana a obedecer al corazón para la realización del Plan de Vida,
el cual todo aquel que encarna en este mundo ha escogido realizar.
Mas del setenta y cinco por ciento (75%) de la
Energía Vital del individuo promedio está ubicada en el cuerpo emocional o de
sentimientos. En tanto que TODO eso no se rinda al manejo del Cuerpo Electrónico
-que es Su Fuente y el Dueño de toda energía- seguirán dándose las limitaciones
y el sufrimiento porque la Ley de la Vida no está siendo obedecida. La Ley de
la Vida por doquier en todo el Universo, es la de regresar a la Fuente de
nuestro Ser, la Perfección siempre en Expansión desde el interior del
Centro-Corazón de la Vida. Esto entraña el control total de toda la Energía
Vital en todo momento, ya que sólo así y entonces la Perfección puede pasar.
Por tanto, el deber de todo Estudiante del “YO
SOY” consiste en vivir en tan íntimo compañerismo con la Presencia, que toda
actividad externa sea la Expansión de Su Perfección. En la medida en que a esto
se le permita tener lugar, el cuerpo automáticamente se tornará Purificado,
Luminoso y Libre de discordia. De allí que Ascienda a la Plena Maestría, y que
el Plan Divino de Vida sea realizado para la eterna alegría siempre en
Expansión del propio individuo, y la bendición de todo lo demás en el Universo.
Tomado de:
universoesarmoniaituzaingo.blogspot.com
compartiendoluzconsol.wordpress.com
22 de febrero del 2015