Pensamiento del Sábado 9 de marzo de 2024.
"Nunca hay que privar a las criaturas de amor. Este es el único derecho divino que el Creador les ha dado: amar y ser amadas. A nadie le está permitido impedírselo. La cuestión es saber cómo amar para evitar los malentendidos y los sufrimientos, pero hay que amar. Tratando de perfeccionar nuestra forma de amar, llegaremos a extraer ese amor que está difundido por todas partes en el universo.
¿Por qué pensar que es absolutamente necesario tener en nuestros brazos a un hombre o a una mujer para recibir y dar amor? Cuando paseamos con alguien, cuando le hablamos, cuando le miramos, cuando le saludamos, todo eso es amor, y amor bajo su forma más sutil, más espiritual. Habéis ya hecho esta experiencia, ¿verdad? Y os habéis sentido iluminados… Así que, ¿por qué no tratáis de permanecer más tiempo en ese estado e incluso amplificarlo?"