Pensamiento del lunes 18 de noviembre de 2019.
"Cuando los humanos nos hacen daño, no son verdaderamente ellos los que desean perjudicarnos, sino entidades malignas que se sirven de ellos. Sin embargo, esas entidades se desplazan y, después de haberse servido de tal persona para llevar a cabo sus malos propósitos, la abandonan y buscan otra… Una vez desembarazada de esta entidad, es posible que la persona que se haya manifestado como un enemigo, se manifieste a continuación diferentemente y que se arrepienta incluso de sus actos; puede también ocurrir que ni siquiera se acuerde de ellos. No es por tanto razonable guardar indefinidamente rencor a alguien o querer vengarse de él. Si disparáis, él también disparará y, todo será un engranaje en el que terminaremos por no comprender nada, cada uno acusando al otro de haber iniciado las hostilidades.
Diréis: «¿Es por tanto contra esos espíritus que debemos luchar?… Pero ¿cómo?» Cultivando cualidades y virtudes que les impedirán hacer de vosotros su presa. Incluso si continúan persiguiéndoos, no os alcanzarán: las adquisiciones que hayáis hecho en el plano espiritual formarán como una muralla alrededor de vosotros.""Cuando los humanos nos hacen daño, no son verdaderamente ellos los que desean perjudicarnos, sino entidades malignas que se sirven de ellos. Sin embargo, esas entidades se desplazan y, después de haberse servido de tal persona para llevar a cabo sus malos propósitos, la abandonan y buscan otra… Una vez desembarazada de esta entidad, es posible que la persona que se haya manifestado como un enemigo, se manifieste a continuación diferentemente y que se arrepienta incluso de sus actos; puede también ocurrir que ni siquiera se acuerde de ellos. No es por tanto razonable guardar indefinidamente rencor a alguien o querer vengarse de él. Si disparáis, él también disparará y, todo será un engranaje en el que terminaremos por no comprender nada, cada uno acusando al otro de haber iniciado las hostilidades.
Fuente:
http://www.prosveta.com
18 noviembre 2019