Pensamiento del domingo 25 de marzo de 2018.
"No se necesita mucho para asegurar la vida material. Y sin embargo los humanos están tan ocupados en crearse nuevas necesidades, que ya no les queda tiempo para pensar en su vida interior. Y de esta forma, a medida que mejora el confort material, el estado psíquico y moral de la sociedad se deteriora, y he aquí nuevos desequilibrios, el aumento de la criminalidad…
Materialmente, en Occidente, nunca se había estado mejor, pero este bienestar no hace más feliz a la gente. Porque una vez pasado el primer momento de satisfacción, no serán ni un coche nuevo ni una casa nueva los que responderán a las necesidades de su alma y de su espíritu. No podemos dudar de que son conscientes de los males que sufre la sociedad: se pasan el tiempo en reuniones para hablar de cómo "cambiar de vida". Sin embargo, todos estos cambios sobre los que discuten, solo afectan al plano material. ¿Quién piensa verdaderamente en reunirse para permitir a cada cual vivir una vida divina? ¿discutir cómo los humanos podrían vivir la vida divina? Por esto, aunque los negocios vayan cada vez mejor, ellos mismos se están desmoronando.""No se necesita mucho para asegurar la vida material. Y sin embargo los humanos están tan ocupados en crearse nuevas necesidades, que ya no les queda tiempo para pensar en su vida interior. Y de esta forma, a medida que mejora el confort material, el estado psíquico y moral de la sociedad se deteriora, y he aquí nuevos desequilibrios, el aumento de la criminalidad…
Fuente:
http://www.prosveta.com