Pensamiento del viernes 17 de junio de 2022.
"Si los humanos fuesen clarividentes, o incluso solamente sensibles, hubieran constatado que la atmósfera del mundo psíquico es todavía más irrespirable que la del mundo físico. Se quejan del humo de las fábricas, de los gases de los tubos de escape de los coches...
Pero ellos mismos, individualmente, no hacen otra cosa que envenenar la atmósfera espiritual con emanaciones tóxicas: sus malos pensamientos, sus sentimientos de odio, de celos, de cólera, de descontento.
Sí, hay que saber que todo lo que fermenta en el hombre como pensamientos y sentimientos malsanos, produce exhalaciones, pestilencias asfixiantes. Se acusa a los coches, pero ¿qué son los coches al lado de varios miles de millones de individuos ignorantes que nunca han aprendido a dominar sus pasiones inferiores?"