Pensamiento del domingo 10 de febrero de 2019.
"Bajo uno de sus aspectos, Dios tiene el rostro de la Madre naturaleza que pone a sus hijos límites que no deben sobrepasar. Si se exceden, decimos que les castiga; pero no, son ellos quienes han salido del recinto en el que estaban al abrigo, protegidos, y al salirse, se han puesto en malas situaciones.
Los humanos deben dejar de razonar como si los actos que cometen fueran externos a ellos y como si, una vez cometidos, pudieran desentenderse. No, hagan el bien o el mal, incluso si escapan a la justicia humana, sus faltas dejan huellas en ellos, y estas huellas son imborrables. Por ello, si quieren sentir la benevolencia y el amor divinos, solo tienen que hacer una cosa: no cometer faltas, y si las cometen, deben tomar conciencia y esforzarse en repararlas.""Bajo uno de sus aspectos, Dios tiene el rostro de la Madre naturaleza que pone a sus hijos límites que no deben sobrepasar. Si se exceden, decimos que les castiga; pero no, son ellos quienes han salido del recinto en el que estaban al abrigo, protegidos, y al salirse, se han puesto en malas situaciones.
Fuente:
http://www.prosveta.com
10 de Febrero 2019