Pensamiento del martes 18 de junio de 2019.
"Desde el momento en que se casan, los humanos creen saber qué es el matrimonio. No. Habida cuenta de la ligereza y de la inconsciencia con la que los hombres y las mujeres deciden unir su destino, es evidente que no lo saben. No saben que, antes de ser una institución humana, el matrimonio es un fenómeno cósmico: la unión de los dos grandes principios masculino y femenino. Dios, el Padre, y su esposa, la Madre divina. Puesto que el hombre y la mujer han sido creados a imagen de esos dos principios, al casarse, no hacen más que repetir los misterios que se celebran desde el origen en las regiones celestiales.
"Desde el momento en que se casan, los humanos creen saber qué es el matrimonio. No. Habida cuenta de la ligereza y de la inconsciencia con la que los hombres y las mujeres deciden unir su destino, es evidente que no lo saben. No saben que, antes de ser una institución humana, el matrimonio es un fenómeno cósmico: la unión de los dos grandes principios masculino y femenino. Dios, el Padre, y su esposa, la Madre divina. Puesto que el hombre y la mujer han sido creados a imagen de esos dos principios, al casarse, no hacen más que repetir los misterios que se celebran desde el origen en las regiones celestiales.
Todo lo que existe en el universo nace de un encuentro, de una unión, de una fusión entre el principio masculino, el espíritu, y el principio femenino, la materia. El matrimonio, su significado, su grandeza, proviene pues de aquello que es reflejo y repetición de fenómenos cósmicos."
Fuente:
http://www.prosveta.com
18 de junio 2019