Pensamiento del viernes 17 de mayo de 2024.
"Observad bien y constataréis que aquél que posee la verdad se distingue de los demás por sus variadas cualidades, pero sobre todo por su bondad, su nobleza, su desinterés. Por ello, cuando veo a alguien que pretende poseer la verdad y que tiene sentimientos de odio, es brusco, vengativo, tengo ganas de decirle: “Vete a dormir, amigo. Si ésta es la verdad, no merece la pena hacer el mínimo esfuerzo para acercarse a ella”. Pero los humanos raramente reaccionan así. Ven a energúmenos predicar el odio y la violencia en nombre de la verdad, y no solamente están dispuestos a seguirlos, sino también a imitarlos.
No creáis nunca a quien pretende tener la verdad si no os muestra claramente su diploma. Diréis: “¿Aquí también hay diplomas?” Sí, con la diferencia de que el diploma de aquél que posee la verdad no es un trozo de papel: este diploma está impreso en él, es un diploma vivo que los Iniciados e incluso los espíritus de la naturaleza pueden leer desde lejos porque brilla, resplandece. Cuando se encuentra un ser así, uno tiene la sensación de estar iluminado, exaltado, como si se asistiera a la salida del sol."