Pensamiento del martes 23 de noviembre de 2021.
"Se oye decir a menudo que el 13 es un número que trae mala suerte, y, en particular, que nunca deben sentarse 13 personas a la mesa. Sí, porque al número 13 no le gustan las impurezas, las combate. Y como también es muy activo, muy dinámico, puede dañar a las criaturas que no posean las cualidades femeninas de bondad, de amor y de dulzura para equilibrar su influencia. Hay que ser puro y lleno de amor para sentirse bien con el número 13.
En el plano físico, el número 13 está ligado a la cruz (1+3=4), es decir, a los sufrimientos, a la cárcel. La cruz es el desarrollo del cubo en el espacio de dos dimensiones y, el cubo, esquemáticamente, representa las limitaciones, la cárcel. El 13 puede, pues, “traer mala suerte” como se dice; pero eso no depende de él, sino de la manera particular con la que cada uno reciba su influencia. Ello depende de la estructura física y psíquica, del grado de desarrollo, de elevación. Algunos caen enfermos, otros se ponen a reflexionar y otros se sienten estimulados a actuar."