Pensamiento del jueves 1 de diciembre de 2016.
"Todos lleváis la verdad en vosotros mismos, porque ella es un mundo enterrado en las profundidades de vuestra conciencia; pero ignoráis su existencia hasta el momento en que, alguien pronuncia una palabra, leéis una frase, encontráis a alguien y esto hace surgir la chispa. Por esto es tan importante que os acerquéis a los seres que puedan producir estas chispas en vosotros. Unos minutos antes eráis ignorantes, y algunos minutos después descubrís que en realidad sabíais. ¡Cuántos de entre vosotros habéis ya hecho esta experiencia! Esto prueba que la verdad, una vez oída o leída, reanima en vosotros las reminiscencias de un pasado lejano.
La verdad que os viene del exterior y la verdad que se despierta en vosotros pertenecen al mismo mundo: son dos almas gemelas de la misma región y de la misma esencia; se fusionan, se confunden porque poseen las mismas vibraciones. Por eso decís: «¡Oh! ¡pero ya lo sabía!»"
"Todos lleváis la verdad en vosotros mismos, porque ella es un mundo enterrado en las profundidades de vuestra conciencia; pero ignoráis su existencia hasta el momento en que, alguien pronuncia una palabra, leéis una frase, encontráis a alguien y esto hace surgir la chispa. Por esto es tan importante que os acerquéis a los seres que puedan producir estas chispas en vosotros. Unos minutos antes eráis ignorantes, y algunos minutos después descubrís que en realidad sabíais. ¡Cuántos de entre vosotros habéis ya hecho esta experiencia! Esto prueba que la verdad, una vez oída o leída, reanima en vosotros las reminiscencias de un pasado lejano.
La verdad que os viene del exterior y la verdad que se despierta en vosotros pertenecen al mismo mundo: son dos almas gemelas de la misma región y de la misma esencia; se fusionan, se confunden porque poseen las mismas vibraciones. Por eso decís: «¡Oh! ¡pero ya lo sabía!»"