Pensamiento del domingo 25 de septiembre de 2022.
"Los conocimientos que la gente ha adquirido en el curso de sus estudios, ¿al servicio de qué o de quién los pone? ¿Cuántos hay que toman conciencia de su responsabilidad y que se dicen: “Veamos, con todos esos conocimientos, debo hacer el bien, ayudar a los demás, no beneficiarme solo yo de ellos”? ¿Creéis acaso que los médicos eligen siempre su trabajo desinteresadamente? ¿Y los abogados? Y los químicos, los ingenieros, los economistas y los periodistas, ¿ponen verdaderamente sus conocimientos al servicio de los demás? Lo que la mayoría de ellos quiere es éxito, gloria, comodidad, placeres...
Los estudios por sí mismos no mejoran a los seres. Al contrario, ¡con frecuencia hacen de ellos verdaderos peligros públicos! Por el contrario, los conocimientos en manos de aquellos que han trabajado sobre su carácter y que están decididos a no utilizarlos para su propio beneficio, sino para el bien de todos, son una fuente de bendiciones."