Pensamiento del jueves 24 de septiembre de 2020.
"Todos aquellos que, en la religión, hacen hincapié en nociones, creencias, ritos, que se apartan de esas realidades esenciales que son la luz, el calor y la vida, son la causa de grandes desgracias. ¡Que empiecen a observar el sol para aprender su lección! El sol es vasto, es tolerante y dice: “Creed en lo que veis, yo os sigo distribuyendo mis riquezas”.
Los humanos, en cambio, se exterminarán entre ellos con tal de imponer su concepción sobre un Dios que ninguno de ellos ha visto nunca. Diréis que no se puede ver a Dios. Sí, ¡precisamente podemos ver un reflejo suyo en el sol! El sol es el que mejor expresa la perfección divina. Da permanentemente a todos la luz, el calor y la vida, sin ocuparse de saber quién es ortodoxo, católico, protestante, judío, musulmán, budista… Para el sol, todos son hijos de Dios.
Tarde o temprano, ya no se podrán ignorar por más tiempo estas grandes verdades, y el mundo entero encontrará la verdadera y única religión. Y los cristianos comprenderán que Cristo es el espíritu del sol. No se trata, claro, de encontrar a Cristo en ese disco solar físico que vemos en el cielo, se trata de sentir que, más allá del sol, que es un símbolo, está el Señor mismo, lleno de amor."
Fuente:
http://www.prosveta.com
24 de setiembre del 2020