"Muy poca gente tiene la intuición de lo que pueda representar un Maestro espiritual para la orientación de su destino, de todo lo que su presencia puede rectificar, mejorar y armonizar en su existencia.
Tener un Maestro, no les dice nada porque saben que con él ya nunca estarán tranquilos: el Maestro les mostrará sus carencias, el peligro de los caminos en los que se comprometen a menudo; entonces, evidentemente, se sentirán un poco limitados, y no quieren. Es una pena, porque con esa actitud se enfrentarán a sufrimientos y limitaciones mucho mayores de las que hubiesen tenido que soportar siguiendo los consejos de un Maestro. "
Fuente:
http://www.prosveta.com