Pensamiento del lunes 24 de enero de 2022.
"La vida fraternal es una riqueza, porque cada cual con su rostro, sus ojos, su voz, su pensamiento, aporta algo vivo, caluroso, de lo que todos pueden alimentarse. Si supierais cómo recibir esas bendiciones, atraerías tanto amor de parte de todos que os sentiríais colmados. ¿Qué os lo impide? “Pero... mi esposa o mi marido estarán celosos, no me permitirán recibir el amor de otro...” No me comprendéis bien, no se trata del amor de una mujer o de un hombre, sino del amor de todos los seres humanos. ¿Qué pueden reprocharos ahí? No puede haber celos, porque cada uno recibirá ese amor... ¡y vuestra esposa o marido también!
Pero la gente no sabe vivir: se entierran en un pequeño agujero, en cualquier sitio, y piensan que la cuestión está resuelta. No, no saben lo que es la verdadera vida. La verdadera vida es la vida fraternal en comunión con todo el universo."