"El medio más eficaz para uniros a Dios es concentraros sobre la luz. En realidad, Dios no es la luz. Es mucho más que eso, no podemos ni conocerle ni imaginarle. En el Génesis, se dice que en el primer día Dios creó la luz, e hizo de ella la sustancia del universo. La luz, que es pues la primera emanación divina, contiene todas las cualidades, todas las virtudes de Dios. Por ello, solo podemos conocer a Dios a través de la luz.
Entonces, he aquí el ejercicio que podéis hacer: todos los días, varias veces al día, pensad en concentraros en la luz, en descansar en la luz, en fundiros en la luz, en impregnaros de ella, a imaginaros que el universo entero se baña en esta luz. Sentiréis que poco a poco todo se restablece en vosotros, que esta luz os aporta la verdadera ciencia, la verdadera paz, el equilibrio, la fuerza. Fuera de la luz, nunca encontraréis el sentido de la vida. "
Fuente:
http://www.prosveta.com
28 junio del 2020