"Quien sinceramente quiere aprender a vivir en una comunidad espiritual, provoca cambios benéficos en su conciencia. Comprende que no puede actuar egoístamente, de forma desordenada, porque ello causaría fatalmente desórdenes y enfrentamientos; se esfuerza por el contrario en comportarse correctamente con los demás, y progresa gracias a esta sincronización con la colectividad.
Y como esta colectividad tiende a estar en armonía con la otra colectividad, la colectividad cósmica, ésta hace penetrar lo bueno en aquél que trabaja para vivir conforme a sus reglas. Por tanto, al tratar de armonizarse con los demás, de vivir una vida más desinteresada, más amplia, más universal, el ser humano se enriquece enormemente, porque entra en contacto con la Inteligencia cósmica y recibe sus bendiciones."
Fuente:
http://www.prosveta.com