Pensamiento del miércoles 29 de diciembre de 2021.
"En la medida en que por su Yo superior el hombre participa en la vida divina, participa también en el trabajo de Dios. Por el momento, todavía no puede darse cuenta de lo que sucede en las esferas superiores de su ser, ya que no tiene un vínculo consciente con ellas, y es precisamente en esto que debe trabajar.
El hombre está habitado por el Espíritu divino y si debe ponerse a su servicio, no es para fortalecerlo, el Espíritu es ya fuerte; tampoco es para instruirlo, porque es omnisciente; ni para purificarlo, pues es una chispa divina. Debe ocuparse solo de abrirle el camino, y en ese momento el Espíritu divino le da su luz, su paz, su amor."