Pensamiento del Sábado 16 de diciembre de 2023.
"Los teólogos presentan la gracia como una manifestación arbitraria e inexplicable de la Divinidad: no sabemos por qué, unos seres reciben la gracia y otros no. No tiene nada que ver con su conducta, sus acciones, y es inútil tratar de entenderlo; simplemente es así. Presentada así, la gracia es incompatible con la justicia, y uno se pregunta entonces si hay una justicia divina. La justicia de los hombres no tiene buena fama, así que ¡Dios también es injusto...!
No, se trata de una comprensión muy pobre de una cuestión que en realidad es fácil de entender. Os daré una imagen. Construís una casa, pero cuando las paredes están terminadas, os dais cuenta de que no tenéis dinero para continuar: entonces vais a un banco. Si comprueban que tenéis capital, aceptan prestaros una determinada cantidad. ¿El banco presta a todo el mundo? No, pero si ya tenéis un capital, un terreno, propiedades, están dispuestos a añadir lo necesario. Del mismo modo, la gracia no llega a todas partes, sino solo a aquél que ya se ha preparado, ha construido algo y posee un capital. Dice: “Este hombre trabaja, reza, medita, construye su templo, así que le daré lo suficiente para terminarlo”. La gracia, pues, es algo más que la justicia, pero sin embargo obedece a una justicia."