Pensamiento del domingo 5 de febrero de 2023.
"La Esfinge de los Egipcios es una representación del zodiaco en relación con los cuatro elementos; tiene una cabeza de hombre (Acuario, signo de aire), un cuerpo de toro (Tauro, signo de tierra), patas de león (Leo, signo de fuego) y alas de águila (Escorpión, signo de agua). Encontramos las mismas figuras en el Apocalipsis de san Juan cuando habla de los cuatro Animales santos que están ante el trono de Dios y que, día y noche, no cesan de cantar: “¡Santo, Santo, Santo es el Señor, Dios Todopoderoso, que fue, es y será!” El primero de esos animales es parecido a un león, el segundo a un toro, el tercero a un hombre, y el cuarto a un águila. Diréis que en el zodiaco no hay el Águila sino el Escorpión.
En realidad, en el zodiaco primordial, el Águila ocupaba el lugar del Escorpión, pero esta es una historia que hay que comprender desde el punto de vista simbólico. Debido a las fuerzas sexuales mal dirigidas, el Águila cayó y se transformó en Escorpión. El Águila representa a aquél que hubiera podido elevarse muy alto en el cielo, pero que cayó porque comió el fruto del Árbol del Conocimiento del Bien y del Mal.