Pensamiento del martes 15 de noviembre de 2022.
"Intentad satisfacer en los seres solo su naturaleza divina, su alma, su espíritu. No sirváis a su naturaleza inferior, egoísta, ávida y exigente...Diréis: “Sí, pero si no satisfago sus caprichos, mi esposa, mi marido se enfadará...” Dejad que el marido o la esposa se enojen y servid únicamente su lado divino.
Jesús dijo: “¡Dejad a los muertos enterrar a los muertos y tú, el vivo, sígueme! ” Si interpretamos ampliamente esas palabras, haremos descubrimientos interesantes. ¿Por qué los hombres y las mujeres tiene tantos problemas entre ellos? Porque siguen a los muertos. Sí, la naturaleza inferior, la personalidad, debe clasificarse entre los muertos, y si tanto buscamos contentarla y satisfacer sus caprichos, terminamos también por morir nosotros mismos. Jesús, al hablar de los muertos, no se refería a los muertos de los cementerios, estos están donde deben estar, y además su alma está viva. Los muertos de los que hablaba Jesús, son los seres que no tienen ninguna vida espiritual: esos son los verdaderos muertos."