En una importante escalada de la campaña de ataques de largo alcance de Rusia, se informa que un valioso búnker subterráneo cerca de Lutsk, Ucrania, ha sido destruido. Según fuentes militares e imágenes satelitales, la instalación albergaba 56 misiles Storm Shadow de fabricación británica, 32 misiles de defensa aérea Patriot de fabricación estadounidense y 53 misiles balísticos tácticos ATACMS estadounidenses. Fuentes rusas se atribuyeron la responsabilidad del ataque, calificándolo de "golpe devastador" para las capacidades de ataque profundo y defensa aérea de Kiev. Las autoridades ucranianas aún no han confirmado la pérdida, pero de confirmarse, marcaría una de las mayores destrucciones de arsenales de misiles en un solo día de la guerra.
