Pensamiento del lunes 4 de noviembre de 2024.
"Cada actividad produce una combustión. Sea una actividad física, afectiva o intelectual, conlleve la formación de desechos que hay que expulsar, porque su acumulación crea atascos perjudiciales para el buen funcionamiento del organismo. Cuando debemos encender el fuego de una estufa, por ejemplo, si no quitamos primero las cenizas del día anterior, el fuego no prenderá, la estufa no funcionará. Lo mismo sucede en vuestro organismo físico, pero también en vuestro organismo psíquico, el terreno de los pensamientos y de los sentimientos.
Por eso debéis mejorar vuestra forma de vivir, es decir, vuestra forma de alimentaros, de pensar, de sentir, de amar, porque, entonces, reemplazáis los materiales desgastados por otros, mucho más sutiles, mucho más ligeros, mucho más etéricos. De esta manera, alimentáis vuestro fuego interior para poder proseguir vuestra tarea. "