Pensamiento del martes 3 de septiembre de 2024.
"Debido a vuestros pensamientos y vuestros sentimientos egoístas, malévolos y vengativos, habéis enturbiado tanto vuestro cuerpo astral y mental que ya no podéis comulgar con las realidades y las existencias del mundo espiritual. Queréis meditar, pero como no lográis desembarazaros de vuestras preocupaciones prosaicas, de vuestros rencores, de vuestras irritaciones y de vuestros recuerdos pesados, no podéis elevaros.
Entonces, por mucho que estéis ahí, con los ojos cerrados, esperando que se desencadene ese movimiento que permita a vuestra alma dar un salto hacia la luz, nada se produce. En esas condiciones, es casi inútil tratar de meditar, porque no obtendréis nada. Vuestros aparatos interiores están atascados, no funcionan. Y así permanecerán hasta que no hayáis comprendido que lo más importante de la vida es ese trabajo interior de renuncia. Es difícil, claro, pero no conseguiréis nada hasta que no empecéis a realizar ese trabajo. "