Pensamiento del Sábado 23 de septiembre de 2023.
"Lo que induce a los humanos a equivocarse es que las consecuencias de su manera de pensar y de actuar no son inmediatas. Cuando se abandonan al desorden interior o cometen actos reprochables, no se precipitan sobre ellos catástrofes, sino que se sienten igual que antes, e incluso se encuentran mejor.
¿Por qué el Señor ha organizado las cosas de esta forma? Pues para dar al ser humano el tiempo y las posibilidades de reparar, de sentar la cabeza. En vez de aplastarle inmediatamente, el amor cósmico le concede un crédito para arreglar y restablecerlo todo. Si transgredís algunas reglas de la vida social, en contabilidad, por ejemplo, no se produce una comprobación inmediata: algunos meses o algunos años después, Hacienda os pide cuentas. Y en espera de la celebración del juicio, todavía se pueden reparar los errores cometidos. Ocurre lo mismo con la vida interior, y esta posibilidad de revisar, de corregir, que le ha sido otorgada al hombre es un aspecto del amor cósmico."