Pensamiento del viernes 12 de enero de 2024.
"Incluso si la vida cotidiana os presenta todo tipo de ocasiones de ser perturbados, maltratados y zarandeados, podéis, a pesar de todo, salvaguardar y restablecer los estados divinos de la conciencia superior. Simplemente hay que habituarse, hay que obtener una gran luz: vivir en una vigilancia, en una atención constante con el mundo divino, pensar desde la mañana hacer todos los gestos de la vida cotidiana teniendo vuestros pensamientos unidos al Cielo.
Si os acostumbráis a mantener esta actitud durante todo el día, constataréis que nada podrá perturbaros por mucho tiempo. Una mala noticia, una enfermedad, un accidente, son acontecimientos que pueden alteraros, pero si os habéis acostumbrado a mantener vuestro pensamiento concentrado en el mundo divino, superaréis mucho más deprisa estas dificultades porque es al espíritu al que Dios ha dado todo el poder."