Pensamiento del martes 8 de mayo de 2018.
"A veces, cuando vais a la montaña de excursión habéis seguramente constatado que son las rugosidades de las rocas las que os permiten escalar. ¿Qué haríais sobre una roca lisa?... Entonces, lo que habéis comprendido para las excursiones en la montaña, ¿por qué no lo comprendéis también cuando se trata de este recorrido aún más significativo que es la vida? ¿Por qué deseáis que vuestra vida sea lisa, que no tenga ninguna aspereza? En esas condiciones nunca llegaréis a la cima, y sobre todo, para descender, ¡qué caídas!
"A veces, cuando vais a la montaña de excursión habéis seguramente constatado que son las rugosidades de las rocas las que os permiten escalar. ¿Qué haríais sobre una roca lisa?... Entonces, lo que habéis comprendido para las excursiones en la montaña, ¿por qué no lo comprendéis también cuando se trata de este recorrido aún más significativo que es la vida? ¿Por qué deseáis que vuestra vida sea lisa, que no tenga ninguna aspereza? En esas condiciones nunca llegaréis a la cima, y sobre todo, para descender, ¡qué caídas!
Por fortuna para vosotros, la vida está llena de asperezas, y es gracias a ellas que todavía estáis vivos. Por tanto, no os quejéis de los obstáculos, de los inconvenientes, de los enemigos: sin ellos, no tendríais nada a lo que agarraros para subir. Aquellos que desean vivir en la facilidad, la tranquilidad y la opulencia, no se dan cuenta de que, en realidad, lo que hacen es labrarse su propia desgracia. Afortunadamente, el Cielo no les escucha, sabe lo que necesitan para progresar."
Fuente:
http://www.prosveta.com